A las 17 horas, el patrón y su asistente le estarán esperando en la Marina di Porto Pignataro di Lipari para la sesión informativa de seguridad, la asignación de camarotes y la organización del fondo común.

Antes de su llegada, el asistente de a bordo ya le habrá proporcionado la cocina, en función de las preferencias y necesidades dietéticas que le haya comunicado. Su trabajo será encargarse de la preparación de las comidas y del orden de la cocina.

Después de despertar y desayunar en el puerto de Pignataro de Lipari, navegaremos hasta la costa este de Vulcano desde donde podremos observar los signos de la reanudación de la actividad del cráter. Atravesaremos el Puerto de Levante y las fumarolas submarinas que emiten tal vapor que hacen de este tramo de mar un auténtico remolino natural.

A la hora del almuerzo estaremos en Gelso, una hermosa playa de arena negra, solitaria y poco concurrida, dominada por un faro muy sugerente, desde el que es posible disfrutar, con cielos despejados, de una vista de la costa sarracena de Sicilia, hasta el Monte Etna.

Por la tarde pondremos la proa en la costa oeste de Vulcano, donde descubriremos la piscina de Venus y la cueva del Caballo, así como varias bahías que esconden muchos pequeños secretos.

Hacia la noche podremos admirar las pilas de Lipari y una mágica puesta de sol antes de desembarcar en Salina para disfrutar de un inolvidable granizado en Alfredo's, cenar y pasar la noche fondeado.

Salida en dirección a Filicudi. 

Para la hora del almuerzo estaremos en el pueblo de Pecorini a Mare, con una parada en el Primeros Auxilios de Tortugas Marinas.

Por la tarde navegaremos hacia Alicudi, la más lejana y salvaje de las Islas Eolias, uno de esos lugares donde el tiempo se ha detenido, la vida fluye lentamente en contacto con la naturaleza virgen, dura y solitaria. 

No hay discotecas, pubs, bancos y cajeros automáticos, solo un pequeño restaurante con un ambiente único o pescadores dispuestos a recibirnos en su casa para cenar, senderos aptos para caminar en mula, el único medio de transporte de la isla, senderos de piedra volcánica y mucha tranquilidad. 

Noche en la boya de la rada.

Dulce despertar en la isla de Alicudi. Aquellos que lo deseen pueden hacer trekking, encontrándose caminando sobre antiguas escaleras de piedra volcánica, hábilmente hechas por las manos expertas de los antiguos habitantes de la isla, que aún representan el único medio de comunicación.

Luego regresaremos a la costa norte de Filicudi donde podremos disfrutar de un baño en la Grotta del Bue Marino y admirar La Canna, una pila que se destaca del azul del abismo por más de 70 metros.

Después del almuerzo navegaremos hacia la bahía de Pollara, en la isla de Salina, famosa por su particular morfología tanto que fue elegida como escenario de la película ''Il Postino''. 

Rodearemos la isla hasta llegar a Santa Marina, un pequeño pueblo situado en las laderas de un enorme cráter, la Fossa delle Felci.

En esta bahía pasaremos la noche.

Por la mañana navegaremos hacia Panarea , donde el mar tiene un encanto particular debido a la presencia de islotes y rocas que forman un archipiélago por derecho propio que descansa sobre un único complejo volcánico, un verdadero paraíso para los buceadores. Buceo y almuerzo en el Scoglio della Nave.

Luego continuaremos hacia Stromboli, el volcán en permanente actividad. 

Subiendo sus laderas hasta donde está permitido, encontraremos el restaurante ''l'Osservatorio'' donde podrás cenar mientras disfrutas del espectáculo verdaderamente inolvidable de la Sciara di Fuoco. Noche fondeada en la bahía de Scari.

Llegaremos a Basiluzzo donde buceando podrás disfrutar de una explosión de colores gracias a la presencia de astroides, esponjas de colores, gorgonias, madréporas anaranjadas y estrellas de mar que pueblan la pared blanca del monolito y Lisca Binca con sus manantiales sulfurosos. 

Por último, Cala Zimmari , donde pasaremos la noche y desde la que se puede llegar al pueblo a pie en pocos minutos.