Dodecaneso

conforman el archipiélago más meridional y cosmopolita, con rasgos arquitectónicos de clara influencia oriental. Fueron los últimos territorios en incorporarse a la Grecia moderna.

El archipiélago es muy diverso, algunas islas son resecas y estériles, otras verdes y fértiles. De hecho, el Dodecaneso ofrece una gran variedad de paisajes naturales y actividades: impresionantes playas equipadas para todos los deportes, desembarcos seguros y solitarios, cuevas y fiordos e incluso un volcán parcialmente activo.

Unas vacaciones inmersas en el azul, el sol y el viento, una solución económica y original para el verano. La navegación no es exigente, el clima es templado, el tiempo es estable, las precipitaciones durante el verano son casi inexistentes. 

Bajo un gran sol, llevado por el viento, de puerto en puerto, de cala en cala, descubriremos los pueblos y desembarcos de las islas del Dodecaneso. Los itinerarios son sencillos, las etapas son cortas, el día fluye relajado, sin pretensiones, entre las islas más pequeñas donde el tiempo parece haberse detenido.

Dependiendo de las condiciones meteorológicas, podemos navegar hacia el norte, entre Kos Kalymnos, Leros, Lipsi y Patmos, o en caso de fuertes vientos, más protegidos hacia el sur, entre Kos, Nissiros, Tilos, Kalki y Symi.

No necesitas equipaje faraónico (¡te pasas todo el día en bañador!), ni experiencia previa, solo mucha alegría, respeto por los demás y una pizca de espíritu de adaptación, unidos por la pasión por el mar.

De hecho, un crucero en velero es, ante todo, unas  vacaciones de sencillez y libertad.  En el mar, el tiempo se expande y se restablece la armonía con la naturaleza. La gente viene a descansar, a desconectar del bullicio, de los ritmos y deberes de la vida en la ciudad.

Las vacaciones en barco son aptas para todos, desde adultos hasta niños, pero es necesario estar en buena forma física general y equipado con buena agilidad para subir y bajar de la embarcación auxiliar, el bote de servicio que a menudo nos llevará desde las radas hasta la orilla.

La elección final sobre el itinerario siempre depende del Capitán.